El rumor del trueque entre Fernando Alonso y Sergio Pérez es imposible que se haga realidad. Dos pilotos como el Nano y Vertappen no pueden compartir equipo. Imaginar escenarios descabellados no es síntoma de hacer buen periodismo.
La tarea básica del periodismo es informar de la manera más clara y objetiva posible. Alimentar rumores de baja estofa no es parte del manual de estilo de un buen periodista. Esta situación sucede en todos los ámbitos del periodismo y no sólo en el deportivo: político, económico y de espectáculos. Y en la Fórmula 1 se llevan cabo estas prácticas desde hace un tiempo atrás.
Se puede entender que durante los recesos, cuando no hay demasiada información disponible, se generen algunas versiones disparatadas (¿Te acordás que Fernando Alonso iba a dejar Alpine para ir a Ferrari en el 2022?) pero por lo general estas no generan tantas expectativas, se olvidan rápidamente y no tienen, por lo general, otra función más que entretener a los aficionados. Esto también sucede con las silly seasons. Un juego en redes sociales se podría llamar.
La búsqueda de un click, de un seguimiento o de un “me gusta” lleva a situaciones insólitas como mandar mensajes ambiguos diciendo que tienen un rumor en su poder, lo cual está mal decirlo porque en definitiva no tiene ningún hecho concreto y comprobable, para disparar todo tipo de especulaciones. Esto no es más que un hecho de desinformación para confundir a la audiencia.
Muchos periodistas o influenciadores deberían cursar la carrera de periodismo o de Comunicación Social en cualquier universidad antes de ponerse frente a un micrófono, una cámara o una computadora. La desinformación siempre tiene varias aristas ocultas ya que sólo busca engañar y confundir a la opinión pública (¿Hace cuanto tiempo que no utilizaba este término?) con un fin determinado.
Toda esta introducción tiene que ver con el rumor que indica un trueque entre Fernando Alonso y Sergio Pérez para la temporada 2024, algo que nada tiene que ver con la realidad ya que la contratación por parte de Red Bull de un piloto como el Nano significará contrariar a Max Verstappen y que se desate una guerra civil dentro del equipo. Ni Christian Horner ni Helmut Marko están tan chiflados como para intentar cometer una locura de esa naturaleza. Las peleas entre Ayrton Senna y Alain Prost terminaron con la igualdad entre los pilotos de un mismo equipo.
Red Bull cuida a Max
Max Verstappen es el piloto estrella de Red Bull y claramente es el favorito de Christian Horner y Helmut Marko por lo cual cualquier movimiento que haga el equipo austríaco respecto a la contratación de un piloto será conversado con Max y Jos, su padre. Y en ese contexto Fernando Alonso se vuelve una amenaza para el corredor neerlandés ya que además de su compañero de equipo se convertiría en su gran rival.
El piloto español es un león herbívoro en este momento ya que no tiene un auto a su altura conductiva para poder pelearle a Max. El Aston Martin empeoró considerablemente tras un gran comienzo de año y ello llevó a que el Nano sólo tenga que preocuparse por terminar las carreras y rasguñar algunos puntos en la medida de lo posible, situación que cambiaría rápidamente si el asturiano recalase en Milton Keynes. Los abandonos en Austin y México serían un mal recuerdo ante esa situación…
No es que el Nano no sea un piloto ambicioso sino que el rendimiento del AMR23 se cayó a pedazos y ello no le permite tener el arma adecuada para pelear por un título. Ahora imaginate que este trueque por alguna razón se lleve a cabo y que el Nano se siente en el RB20 para disputar la temporada 2024. Todo comenzará amigablemente y al cabo de las primeras carreras el ambiente se irá enrareciendo.
¿Vos creés que Alonso no va a desobedecer las órdenes de equipo para pelearle el campeonato a Max? En tres carreras como máximo se desata una guerra civil dentro de Red Bull que terminará con heridos y perjudicados en ambos bandos. Si algo saben hacer muy bien en la escudería austríaca es cuidar a Max Verstappen para que se sienta cómodo y gane títulos. Y eso no lo cambiarán de buenas a primeras…
Fotos: gentileza Aston Martin y Red Bull Content Pool.
