
Los pobres resultados obtenidos durante el año y los problemas estructurales terminaron condenando al W13. El equipo alemán busca que el W14 sea un auto ganador pese a que perdieron mucho tiempo en solucionar los problemas del monoplaza actual. En Brackley hay mucho trabajo por delante.
No fue el año esperado por el equipo alemán, ya que no estuvo ni cerca estuvo de cumplir con sus objetivos pese al repunte evidenciado en las últimas carreras. Toto Wolff y compañía creían que el dominio de su equipo en la Fórmula 1 no se alteraría y que seguirían ganando campeonatos pese al cambio reglamentario que entró en vigencia a principios del 2022. Los sueños de revancha por parte de Lewis Hamilton contra Max Verstappen quedaron rápidamente sepultados por la cruda realidad. El heptacampeón debió posponer momentáneamente la fantasía de su octavo título.
El W13 fue un auto espantosamente mal diseñado al que se le pudieron maquillar sus defectos para convertirlo en un auto que les permitiese a Lewis y a George sumar puntos. De hecho ni Alpine ni McLaren pudieron competir contra el peor auto de Fórmula 1 construido jamás por Mercedes. Teniendo un auto espantoso de arranque en cuanto a rendimiento igualmente al equipo alemán se le abrió la posibilidad de pelear por el subcampeonato con Ferrari. Y esto se debe a una conjunción de hechos: por un lado están todos los yerros del equipo italiano desde Austria en adelante y por el otro asoman la confiabilidad y la evolución del W13.
George Russell y Lewis Hamilton sumaron puntos en dieciocho de los veinte grandes premios disputados. Ambos cuentan con un abandono y con una posición fuera de los puntos, nada mal para haber competido con un monoplaza que le dio muchos problemas tanto a los ingenieros de Mercedes como a los pilotos.
El heptacampeón levantó notoriamente su nivel (parece que finalmente pudo superar lo sucedido en Abu Dabi 2021 y eso es una buena noticia para la Fórmula 1) y volvió a ser el líder de Mercedes. El monoplaza evolucionó muy bien y recortó distancias con Ferrari y le está disputando el segundo lugar en el Campeonato de Constructores. Incluso ahora pelea por la pole y hasta Toto Wolff se anima a soñar con alguna victoria en las carreras restantes.

El mea culpa de Andrew Shovlin
No hicimos un buen trabajo al inicio de la temporada. Pasamos de una situación de ganar ocho títulos consecutivos a encontrarnos a una gran distancia del primero en el inicio del año. Siendo honesto debo decir que Ferrari y Red Bull han hecho un mejor trabajo que nosotros pero hemos funcionado bien para entender lo que pasó y recuperar algo del terreno perdido.”
La posición en la que estábamos en la primera parte del año era claramente en la zona media ya que nos estaban ganando monoplazas a los que habíamos superado notoriamente seis meses antes. No teníamos el auto más rápido y tampoco estábamos dónde queríamos pero ahora sentimos que estamos de nuevo en la pelea con los dos equipos punteros. Ahora vemos un claro camino para volver a la lucha por poles y victorias.”
El jefe de Ingeniería de Mercedes y sus conceptos al sitio web de la Fórmula 1

La visión de Toto Wolff
Creo que hemos perdido entre ocho y diez meses en términos de desarrollo del W14 porque no podíamos descubrir que era lo que estaba mal en el W13. Todos nosotros estamos pensando a largo plazo. La forma de pensar del equipo y el rendimiento no se basa en lo que sucede en un año o en un fin de semana. Así es como hemos sido capaces de ganar campeonatos durante mucho tiempo.”
Declaraciones del Team Principal de Mercedes a Autosport

La imperiosa necesidad de ganar
El equipo alemán se juega muchísimo con el W14. Una mala temporada la puede tener cualquier escudería (la historia de Ferrari sobra como ejemplo al respecto) pero en estas circunstancias es donde se muestra el temple y la inteligencia necesarios para afrontar las dificultades.
El ejemplo de Lotus en 1979 es para ser tenido en cuenta. Un equipo campeón que fracasó estrepitosamente con su nuevo monoplaza y que nunca más pudo recuperar su brillo (ni los títulos) para terminar alejándose de la Fórmula 1 algunos años después.
El equipo de Toto Wolff está lejos de esta situación pero una espiral de fracasos abriría algunas grietas en su confianza y en su autoestima. Y eso no sería bueno para nadie, ni siquiera para la misma Fórmula 1 que está buscando la manera para que la escudería de Toto Wolff se sume a la lucha entre Red Bull y Ferrari en la temporada 2023. Mercedes sabe que no puede equivocarse otra vez y para ello están trabajando, el 2023 está a la vuelta de la esquina y no hay tiempo que perder.

Fotos: gentileza Mercedes AMG F1.
Lo leo en todos los blogs que publica pero este en particular si la intencion es atraer lectores me parece fatalista y muy exagerado , valiendose de una comparacion que no tiene sentido……no soy fanatico de MB pero por favor no decaiga en la calidad de sus articulos si realmente no tiene contenido que publicar.