
Los fanáticos de Lewis Hamilton ya juntaron más de 95.000 firmas para que anulen la victoria de Max Verstappen en Abu Dabi 2021. La FIA no le dará curso legal a esta propuesta para evitarse mayores dolores de cabeza en el futuro. Los ejemplos en otros deportes. Las polémicas que tiene la Fórmula 1.
Cada tanto aparecen noticias sobre la definición del título 2021 en Abu Dabi. La petición para anular el resultado suma firmantes minuto a minuto pero eso no significa que la FIA vaya a cambiar un resultado deportivo sucedido en pista. Esto no es como una sanción por alguna irregularidad, aquí está en juego un campeonato del mundo y que su revisión abriría automáticamente las puertas para que se pongan bajo la lupa unos diez campeonatos más por lo menos. Reescribir la historia es un absurdo que ninguna entidad deportiva a nivel mundial está dispuesta a hacer.
Felipe Massa manifestó hace unos días que está buscando la manera de presentar una demanda para que se pueda anular el escandaloso Gran Premio de Singapur 2008 y que le otorguen el título de aquel año a él. ¿Las posibilidades? Prácticamente nulas al igual que las gestiones que están realizando Cora y Mariana Reutemann por la definición del campeonato 1981 donde su papá fue el gran perjudicado.
Los seguidores de Hamilton ahora están pidiendo directamente que cambien los resultados del Gran Premio de Abu Dabi. Quieren la descalificación de Max Verstappen en dicha prueba. Buscan que el piloto neerlandés pague por una decisión (errada o no, eso es harina de otro costal) de Michael Masi, el director de carrera de aquella carrera. Es como si a Alemania le quitasen el título de los mundiales Italia 90 y Brasil 2014 porque Argentina fue notoriamente robada perjudicada por los árbitros.
Max Verstappen ganó el título de manera irreprochable y legal por lo realizado a lo largo de la temporada 2021, eso debe estar totalmente fuera de discusión. Incluso Toto Wolff se salió con la suya y logró que Michael Masi fuese cesanteado de sus funciones por la FIA siendo que sus reemplazantes, Eduardo Freitas (actualmente suspendido de oficio por su mala labor en Japón 2022) y Niels Wittich (hizo un desastre en Australia 2023) tuvieron un desempeño cuestionable a lo largo del 2022. Un director de carrera es como un árbitro de fútbol, es imposible que deje a todos conformes…

Los ejemplos en otros deportes
Guillermo Vilas fue perjudicado por un error de la ATP (había semanas enteras que no se cargaban los rankings) que le privaron ser número 1 del mundo durante siete semanas no consecutivas entre 1975 y 1976. La Asociación de Tenistas Profesionales admitió su error pero no lo corrigió. ¿Por qué? Sencillamente porque de ese modo se evitan varios dolores de cabeza en el futuro. Saben que si abren las puertas a un reclamo de esa naturaleza estarán sentando un precedente enorme para que los reclamos deban ser atendidos. ¿Te imaginás el caos que sería el fútbol argentino si habilitan algo así? Se discutirían hasta los campeonatos jugados en la década del 30 del Siglo XX…
Los mundiales de fútbol son otro caso emblemático. Además de las finales en las cuales Argentina fue perjudicada también hay otros partidos que se pueden cuestionar como la final del mundial 66 en Wembley cuando Inglaterra le ganó a Alemania gracias a un gol que no fue. Ni hablar del partido entre Corea del Sur e Italia (2-1 a favor de los asiáticos) en el mundial 2002 con un vergonzoso arbitraje del ecuatoriano Byron Moreno.
La final de la Copa Libertadores 2018 entre River Plate y Boca Juniors fue un escándalo. Daniel Angelici, presidente del club de La Ribera, mandó a sus abogados al TAS para que pidan que le quiten el título a River. Los Millonarios habían conquistado América por cuarta vez en su historia de manera brillante y su clásico rival quiso apoderarse de un trofeo que no había ganado en la cancha. Por supuesto que el TAS no le dio curso a la demanda presentada por los xeneizes…
Siguiendo con Boca, fue escandaloso el choreo a mano armada el robo sufrido por Rosario Central en la final de la Copa Argentina. La actuación de Diego Ceballos en el estadio Mario Alberto Kempes fue delictiva, todos los fallos favorecieron a un solo equipo: Boca Juniors. Pocas veces se vio algo tan asqueroso en una cancha de fútbol. Previsiblemente el club rosarino no protestó porque sabía que no iba a conseguir nada y el partido quedó con el resultado 2-0 a favor del equipo porteño. El día que se abran estos debates en serio se va a revisar todo y eso a las asociaciones no les conviene bajo ningún punto de vista. Mejor dejar todo como está…

La Fórmula 1 ya tiene sus propias polémicas
La categoría ya atravesó momentos muy complicados en unas cuantas definiciones de campeonatos en los últimos cincuenta años. 1981, 89, 1990, 94, 98, 2007, 2008 y 2021 (puede que la memoria me falle y que me haya olvidado de alguno más) como para que la FIA acepte abrir un proceso que sentará jurisprudencia en todas las categorías manejadas por la entidad con sede en París.
Imaginate este caos: las hijas de Carlos Reutemann contra la FIA, Alain Prost contra la familia de Aytron Senna, los parientes de Magic contra el Profesor, Damon Hill contra Schummy, Corinna versus David Coulthard, McLaren y Mika Hakkinen, el equipo de Woking contra Ferrari, los italianos le devuelven gentilezas a McLaren y a Hamilton y ahora esto. La FIA se transformaría en un ring y en un pandemonium, por eso evitan este tipo de situaciones más allá de la justicia que pueda tener un reclamo.
La idea de quienes firman esta petición tal vez sea desde su óptica de dotar de algún sentido de justicia a la definición del campeonato 2021 pero que a su vez se transformará en un acto de injusticia hacia Max Verstappen. Los errores de la FIA no tienen por qué pagarlos ni él ni el resto de los pilotos. Y lo mejor para todos, por más doloroso que parezca, es dejar las cosas como están y mejorar los reglamentos en el futuro para que estos hechos no vuelvan a ocurrir.

Fotos: gentileza Prensa River Plate y Red Bull Racing.