
El Team Principal de Mercedes acumuló poder a fuerza de triunfos. No quiere a Andretti dentro de la categoría y sí a Audi. ¿Hará una carrera similar a la de Bernie Ecclestone?
Frank Williams describió a la Fórmula 1 de manera descarnada hace unos cuantos años atrás: “La F1 es un negocio seis días a la semana y un deporte los domingos.” Y la máxima categoría del automovilismo mundial fue profundizando esa línea con el correr del tiempo sobre todo desde la llegada de Liberty Media y la americanización de la categoría.
Toto Wolff fue un paso más allá y se erigió en la figura con más poder del paddock desde la época del inefable Bernie Ecclestone y sus peleas con la FISA. El austríaco acumuló esa fuerza mediante los triunfos conseguidos por su escudería en la última década a diferencia de Bernie que lo hizo construyendo poder desde la presidencia de la FOCA y firmando el primer Pacto de la Concordia en 1981.
Es tal el vigor que tiene Toto en la actualidad que es accionista, CEO y Team Principal de Mercedes en la Fórmula 1 desde la temporada 2013 cuando dejó su puesto en Williams para hacerse cargo de la escudería con base en Brackley.
En un momento buscó en transformarse en el CEO de la Formula One Management pero el veto de Ferrari se lo impidió. Todo esto sucedió de manera informal ya que sólo fue un tanteo y ante la negativa del equipo italiano desistió de elevar su candidatura al puesto.

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Acumular poder a base de triunfos
El ascenso de Torger Christian Wolff dentro de la Fórmula 1 fue meteórico. Primero entró como accionista en el equipo Williams pero en el 2013 se marchó a Mercedes, siendo el gran pilar con el cual el equipo alemán logró mantener una hegemonía nunca antes vista desde la temporada 2014 a la fecha.
Ocho Campeonatos de Constructores y siete de Pilotos en apenas ocho años eximen de cualquier comentario al respecto al igual que los 114 triunfos obtenidos en esta segunda etapa de Mercedes en la Fórmula 1. Estos números son la consecuencia del plan ideado por Toto apoyado por su gran amigo Niki Lauda.
Una gran parte del éxito del equipo es la filosofía aplicada por Wolff: a diferencia de Ferrari en Mercedes no hay culpables de carne y hueso sino que se buscan corregir los errores en general sin buscar un culpable en particular. Y vaya si funciona.
Cuando el W13 era un auto mucho peor que en la actualidad no se buscaron culpables sino que todos trabajaron para mejorar el monoplaza lo más rápidamente posible. Hasta Lewis tuvo que aceptar ser quien desarrolle el auto y no se quejó por ello, esas cosas solamente las consigue un líder como Wolff.
Todo ello sirvió para que Christian Wolff se erija en el hombre más importante de la categoría y que sus deseos sean escuchados. Cuando su equipo reclamó que Michael Masi sea despedido de su puesto de Director de Carrera luego de su controvertida actuación en la definición del campeonato 2021 mostró su poder sin tapujos. Y consiguió que apartaran al australiano de sus funciones.
La gran sospecha sobre las actualizaciones antiporpoising que se aplicarán desde el próximo Gran Premio de Bélgica fueron hechas a la medida de Mercedes para que el equipo alemán recupere protagonismo. Toto tiene poder y lo ejerce sin ningún tipo de culpas.

¿Hará un recorrido similar a Bernie Ecclestone?
Las similitudes entre las carreras de Toto y Bernie en la F1 tienen algunas similitudes y nada más. Por caso el nonagenario ex hombre fuerte de la Fórmula 1 tiene una lengua filosísima mientras que Wolff es más mediador de las situaciones y rara vez ataca a alguien aunque la cantidad de exabruptos vertidos contra Michael Masi son la excepción que confirma la regla.
Aún así se opone al ingreso de Andretti como equipo de Fórmula 1. La verdadera razón es que no quiere dividir los ingresos de la categoría entre más equipos pero no tiene ningún empacho en señalar que la entrada de Audi sí sería beneficiosa para El Gran Circo, parece que Toto se olvida cual es la esencia de la Fórmula 1 más allá del negocio. No por nada Ola Källenius aún sigue enojado con él por la manera en que Wolff actuó tras la controvertida definición del campeonato 2021.
Toto Wolff se convirtió en uno de los nombres más importantes de la Fórmula 1 actual. No lo logró por haber hecho aportes tecnológicos relevantes a la categoría sino por su gran habilidad e inteligencia para moverse en el paddock y tener un equipo ganador, lo cual no es poco y tiene algunas aristas parecidas al Bernie Ecclestone de la época de Brabham. La carrera de Toto no tiene techo y es muy probable que en el futuro se lo vea en un rol dirigencial salvo que decida sorprendernos una vez más.

Fotos: gentileza Mercedes AMG F1.