La increíble victoria de Lewis Hamilton en Rusia le puso más picante al fantástico campeonato 2021. La desobediencia que Lando pagó muy cara le abrió las puertas de la victoria al piloto inglés. La gran remontada de Max Verstappen fue un golpe que no esperaban en Mercedes.
Nadie pero absolutamente nadie dudaba de la primera victoria de Lando Norris en la Fórmula 1 a orillas del mar Negro hasta que apareció el agua, el jovencísimo piloto inglés desoyó a su ingeniero y se la jugó tal como Rubens Barrichello en Alemania 2000 cuando Rubinho ganó su primer carrera en la categoría.
Barrichello debió tomar una decisión con los neumáticos de piso seco porque la carrera se disputaba bajo un diluvio mientras que sus oponentes entraron desesperados a boxes para cambiar cubiertas. A Rubens la jugada le salió perfecta en aquella ocasión mientras que Lando quedó condenado por su decisión. Ya aprenderá…
Lewis al acecho
El piloto inglés quiso colarse en la largada por la cuerda de George Russell y casi se tocan. A partir de allí es que se calmó e hizo una carrera inteligente sin tomar grandes riesgos. Así llegó hasta el segundo lugar cuando en Mercedes debieron decidir que hacían ya que el agua que comenzó a caer sobre el final de la carrera complicó a todos.
Y allí estuvo brillante la gente de Toto Wolff ya que decidieron probar primero las cubiertas intermedias con el bueno de Valtteri Bottas para ver que resultado daban. Viendo que el mismo era satisfactorio y que Max ya había entrado a colocar las intermedias metieron a Hamilton en boxes en la vuelta 49 para calzar las intermedias y que el holandés no se acerque tanto al vigente campeón. Esa era la idea pero la realidad determinó que Lewis salió a la caza del McLaren número 4.
Lando Norris fue víctima de su inexperiencia en estas lides mientras todo eso ocurría en la pista. El joven piloto inglés no supo manejar la situación como expliqué más arriba (su ingeniero tampoco ya que debió ponerse más firme) y terminó cediéndole el triunfo a un Lewis Hamilton que jamás rechaza regalitos de esta índole.
Ser un gran piloto no solamente es tener un buen auto, un buen equipo de respaldo o ir rápido siempre. No. También es fundamental saber leer el entorno y las circunstancias. Por eso ganó Lewis y por eso perdió Lando. Ya lo dijo alguna vez el enorme Niki Lauda: se aprende mucho más de los fracasos que de los éxitos.

¿Y Max?
El piloto holandés tuvo bastante trabajo hasta que logró escalar desde el último lugar hasta el séptimo puesto. Esta carrera fue toda ganancia para el número 33 ya que no esperaban ni él ni Red Bull que pudiese terminar tan arriba.
Claramente minimizó los daños en dos circuitos totalmente desfavorables para los autos de Milton Keynes. Una vez que entró en boxes (todo el tiempo que estuvo detrás de Daniel Ricciardo pareció una eternidad) en la vuelta 48 pudo avanzar notablemente hasta el segundo lugar.
Este resultado le da muchas fuerzas a las aspiraciones del holandés por ser campeón del mundo. Ahora vienen una serie de circuitos más favorables para el RB16 y allí tratará de recuperar el liderazgo del mundial ya que está a sólo dos puntos de Lewis.
¿Y ahora?
El campeonato sigue, aún faltan siete grandes premios para definir al nuevo campeón. Seis de ellos tienen nombre: Turquía, Estados Unidos, México, Brasil, Arabia Saudita y Abu Dabi. Nos falta conocer al misterioso al país anfitrión de la carrera que se disputará el próximo 21 de noviembre.
Gran parte de la ventaja de Mercedes se licuará en estas carreras ya que estos circuitos son más favorables al RB16B que al W12. El equipo de Brackley no pudo sacar gran ventaja en dos circuitos netamente favorables para sus autos como Monza y Sochi. Ni siquiera funcionó la estrategia de mandar a Valtteri atrás de todo para contener a Max. Y el cambio de motor de Max condiciona a la marca de la estrella hacia el futuro.
Pero no hay que confiarse, Mercedes (y Lewis, of course) no van a entregar el campeonato sin proponer lucha como hasta el momento. Nos queda el último tercio de la temporada y la pelea por los títulos será más apasionante que nunca. Como debe ser.

Fotos: gentileza Mercedes AMG F1 y Red Bull Racing Honda.