
El piloto mexicano quiere pelear el título con Max Verstappen. Para ello debe mejorar sus puntos débiles, ser consistente y presionar al neerlandés. Es la única forma que tiene para que Red Bull no tome partido por el actual campeón.
La única manera que tiene el segundo piloto de una escudería para desafiar a la estrella del equipo es tener ritmo de carrera, constancia, velocidad, una cierta dosis de agresividad y estar preparado mentalmente para ese tipo de juegos. Nico Rosberg vivió al límite durante tres años para poder presionar a Lewis Hamilton y cuando finalmente lo venció decidió retirarse de la Fórmula 1 debido a las altas cargas de estrés y de extenuación que portaba. Un título era suficiente para el alemán.
Aún es temprano para ver quienes lucharán por el campeonato pero la lógica indica que el principal antagonista de Max Verstappen será Sergio Pérez. Fernando Alonso, el mejor del resto por ahora (¿reaccionarán Ferrari y Mercedes?), está a años luz del binomio que conduce el RB19. El español tiene el talento necesario para buscar su tercer título pero su AMR23 es claramente inferior al auto azul. Una cosa es querer y otra muy distinta poder…
Para que Sergio Pérez pueda pelear sin ningún tipo de obstáculos por el campeonato primero deberá mejorar sus puntos flojos como las largadas, malas clasificaciones y la falta de ritmo de carrera. Comenzó bien en el 2023 en cuanto a la consistencia en carrera pero largó mal tanto en Baréin como en Arabia Saudita. Luego se recuperó pero son ventajas que no puede darle a Max. Recién cuando solucione esto (y se siga mostrando veloz) podrá tener luz verde de Red Bull para pelear. O que al menos sean imparciales con ambos pilotos…

Mantener el ritmo de carrera será la clave
El joven neerlandés se preparó toda su vida para ganar y lo disfruta. Y no le va a hacer el camino fácil al crédito de Guadalajara. Sergio deberá vencerlo reiteradamente en pista para que Helmut Marko y Christian Horner le permitan pelear por el campeonato y no resignarse a ser el piloto número dos del equipo. Incluso de eso modo Max no se quedará de brazos cruzados y tratará de imponer su mayor jerarquía dentro de la escudería.
El duelo que Verstappen sostuvo en 2021 con Lewis Hamilton lo entrenó en estas lides física y emocionalmente. Checo no está acostumbrado a ese nivel de presión y para poder competir con Max deberá llevarlo al límite toda la temporada. El piloto mexicano no puede darse el lujo de tener una mala clasificación, una pésima largada o una carrera sin ritmo ya que allí será presa fácil de su compañero y del mismo equipo ya que no le brindarán el apoyo necesario si no está a la altura de los acontecimientos.
¿Es posible que venza a Max? Claro que sí pero para lograr su cometido deberá estudiar muy bien la temporada 2016 y adoptar la misma actitud que tuvo Nico Rosberg para sacar de sus casillas a Lewis Hamilton. Si duda o titubea no habrá lucha posible. Sin ritmo de carrera o con inconsistencias durante los fines de semana no podrá pelear. Checo no puede permitirse una mala clasificación o una largada con dudas. Para presionar a Max deberá rendir al 120 %.
En las dos primeras carreras del año en Bareín y en Arabia Saudita su rendimiento tuvo altibajos aunque no su ritmo de carrera. Dos largadas con dificultades en las cuales perdió el puesto y luego debió batallar para progresar encienden una pequeña luz de alarma sobre el verdadero nivel de Sergio. A su favor cuenta el hecho que la temporada recién está comenzando y que puede progresar.

La actitud de Red Bull
El neerlandés querrá una unidad de potencia más vigorosa, más y mejor atención y privilegios en pista (que Checo lo deje pasar sin pelear). Y allí Sergio deberá convencer a la plana mayor del equipo austríaco que puede pelear el campeonato sin que todo termine en una guerra como las que vivieron en Mercedes en 2016 y en Williams en 1981.
Primero Checo deberá mostrar sus progresos, su consistencia y su ritmo de carrera para que el equipo se declare neutral y deje pelear libremente a ambos pilotos. Pero si el oriundo de Guadalajara muestra dudas o si su nivel decae no lo ayudarán a recuperarse y allí Verstappen podrá ir en busca de su tercer campeonato consecutivo.
Red Bull no va a perjudicar a Checo de manera intencional tal como le sucedió a Carlos Reutemann en 1981 con Williams pero tampoco lo apoyará si es que su nivel está por debajo del mostrado por Max. Lograr que el equipo de Milton Keynes se declare neutral ya sería un gran alivio porque allí ya dependerá de sus cualidades conductivas en pista.
Aún es pronto para que Helmut Marko y Christian Horner decidan a que piloto favorecer. Sergio tiene diez carreras más para mostrar lo mejor de sí y convencer a sus jefes que tiene el ritmo, la velocidad y la constancia necesarias para pelear por el título. Solamente de él depende. ¿Podrá?

Fotos: gentileza Red Bull Racing.